El crítico debería de saber que en los festivales los artistas no se “enfrentan” unos contra otros: los buenos flamencos se pelean con la dificultad de los cantes y el público lo agradece. Y también conviene considerar que estamos hablando de cante flamenco o cante jondo y que, en este caso, un cantaor y un guitarrista pueden transmitir al aficionado al menos tanta emoción como lo hace otro acompañado de cien músicos. Y el flamenco, es eso: transmitir sentimientos y emocionar. Y, obviamente, el público asistente al Teatro Real no tiene por qué ser más entendido en Arte Jondo que los aficionados andaluces que acuden a los Festivales Flamencos.
Opinión
A vueltas con Paco Toronjo y El Cabrero
Reitero mi agradecimiento por las numerosas respuestas a la pregunta que publiqué hace unos días: ¿Por qué se compara sólo a EL CABRERO con PACO TORONJO, o viceversa, siendo tantos los cantaores/as que han grabado y hacen los fandangos de Huelva y del Alosno? Pregunta mal formulada, porque se entendió justo al revés de lo … Sigue leyendo A vueltas con Paco Toronjo y El Cabrero
Y en eso… llegó Fidel
Ha muerto Fidel y pese a la certeza de que el tiempo se lo llevaría más temprano que tarde, he sentido esa punzada de dolor que sólo te da cuando se pierde a alguien muy querido y cercano. Fidel, el Che, Camilo, etc forman parte de mi vida desde niña porque en mi casa se … Sigue leyendo Y en eso… llegó Fidel
Productores independientes, esos héroes!
Ser manager de una gran figura del Flamenco es relativamente cómodo y gratificante. Es la música patria más exportable, goza de un amplio circuito dentro del Estado, sus representantes más destacados cuentan con apoyo institucional que se traduce en subvenciones a las producciones y giras o su inclusión, casi por norma, en todos los grandes … Sigue leyendo Productores independientes, esos héroes!
De pesebres y pesebreros
En cuarenta años dedicada a la producción y distribución de música, he visto pesebreros de todos los colores y rangos que comparten factores: pocos escrúpulos, hipocresía elevada al cuadrado y “pelaje” de camaleón. El denominador común: la ambición. El pesebrero suele pensar, opinar y creer ad hoc, según el interlocutor y, cuando las circunstancias lo … Sigue leyendo De pesebres y pesebreros